En este artículo te ayudaremos a saber cuándo es el momento ideal para tomar la decisión de tener un segundo hijo.

Debes saber, antes que nada, que no existen reglas fijas para esto; siempre depende de nosotras y de nuestra pareja. Sin embargo, una ayudita siempre viene bien para descubrir dentro de nosotras mismas lo que no conseguimos adivinar.

Por eso, te traemos 5 preguntas en cuyas respuestas reside tu deseo y capacidad de ser madre por segunda vez.

¿Por qué tener otro hijo?

Cuando ya pasamos por la experiencia de un embarazo puede que nos ocurran dos cosas.

1. Que nos hayamos sentido tan fantásticas que tengamos muchísima seguridad en nosotras mismas como para pasar nuevamente por esa experiencia;
2. Que haya sido una situación tan estresante y problemática que no deseemos volver a atravesarla.

Tienes un hijo que es una maravilla. Lo adoras, le cuidas, le alimentas. Nada podría ser mejor. Pero, a veces, te preguntas cómo sería tener una familia más grande e imaginas a tu hijo con un compañerito de su edad que haya crecido en tu vientre. Entonces, posiblemente le plantees a tu pareja que busquen juntos el segundo. Independientemente de lo que ella te diga, debes saber que, antes de tomar esta decisión, así como lo hiciste con el primero, debes analizarlo fría y exhaustivamente para evitar meterte en camisas de once varas.

Ya sabes que un bebé tiene muchas exigencias. Si ya has conseguido estabilizarte y reorganizar tu vida, después del primero, debes estar preparada para que nuevamente ésta se desbarajuste y tengas que adaptarte a esa nueva realidad.

Cuándo tener un segundo hijo

Esta pregunta solo puedes responderla tu junto a tu pareja. No existe una respuesta correcta o incorrecta; aunque, posiblemente si ya tienes pensado tener más de un hijo, es conveniente que no dejes pasar muchos años entre uno y otro, a fin de que puedan criarse juntos, acompañarse y jugar a la par.

El momento en el que surge el deseo de tener otro hijo suele estar relacionado con el crecimiento del primero. Cuando lo ves caminando y rebuscándoselas para comunicarse de la forma en que sabe hacerlo, te planteas la posibilidad de ofrecerle una compañía para llenar de más inocencia el hogar.

La diferencia ideal entre hermanos no viene asignada en un catálogo, solamente los padres pueden conocerla o intuirla; por lo que no esperes que este artículo resuelva tu disyuntiva. Lo que sí te ofrecemos son 5 preguntas que al responderlas, te ayudarán a conocer tus deseos y posibilidades de ser mamá por segunda vez.

1. ¿Sueles soñar conque tus hijos tengan edades similares porque deseas que sean buenos compañeros de juego?
2. ¿Estás realmente dispuesta a tener que hacerle frente a la falta de sueño a causa de estar a disposición de los cuidados que te exigirá un recién nacido?
3. ¿No prefieres espaciar más tus embarazos para tener tiempo de relajarte y a la vez de disfrutar al 100% de tu hijo mayor?
4. ¿Crees que si hay más diferencia entre tus hijos se reduce el riesgo de que surjan rivalidades entre hermanos al estar en etapas de desarrollo similares?
5. ¿Crees que serás capaz de ocuparte de las necesidades de ambos niños sin descuidar tu bienestar y tu relación con tu pareja?

Para que puedas estar más tranquila, te contamos. Si tu respuesta ha sido afirmativa para las dos primeras preguntas, indudablemente es el momento de quedarte embarazada. Pero si has respondido de forma positiva a la tercera y cuarta pregunta, lo mejor será que esperes, porque eso denota que prefieres disfrutar y atender mejor a tu hijo mayor.

No te asustes si ya tienes cierta edad, recuerda que incluso hasta los 40 años puedes ser madre; lo único que debes hacer es buscar estar feliz. No te olvides que el que mucho abarca poco bien hace.

También debes tener presente que la vida no es algo estructurado. ¿Que queremos decir con esto? Que no siempre las cosas son como las planeamos y que, aun teniendo un nuevo hijo no te puedes asegurar la convivencia feliz entre hermanos. De hecho, cabe la posibilidad de que tus niños no resulten semejantes, porque no compartan gustos ni experiencias, y la convivencia no sea tan feliz como la imaginaste. Nada te asegura que tu segundo hijo se convierta en el compañero de juegos que soñabas para el mayor.

Es muy importante que respondas a las preguntas con total sinceridad. Ya sabes que ser madre no es un juego, mucho menos lo es serlo por segunda vez. Debes tener la fortaleza y el equilibrio suficiente como para no descuidar a tu otro hijo y el resto de tus actividades.

Tampoco debes olvidarte de que al elegir quedarte embarazada siempre rozas la posibilidad de concebir dos bebés juntos, por lo que si has decidido tener un segundo hijo, debes tener en claro si podrás hacerte cargo de tres. Es cierto que las posibilidades de que tengas gemelos, si no hay precedentes en tu familia, es bastante baja, pero siempre existen las excepciones. No lo olvides.

Las demandas propias de un recién nacido

De todas formas, además de tus deseos y tu capacidad emocional para enfrentarte a una doble maternidad, es importante que planifiques con detenimiento cada exigencia de esta situación. Para eso debes pensar en si con la economía que tienes serías capaz de asumir los gastos que exige una familia más numerosa. Sobre todo, recuerda que el primer año de vida de tu hijo gastarás muchísimo dinero en pañales y complementos… y, en caso de que no amamantes, también en leches de sustitución.

A veces, la necesidad de tener un segundo bebé viene por la nostalgia de esos primeros instantes con tu primer hijo, con el deseo de sentirte tan unida a él en esos nueve meses de embarazo y de haber visto cómo se desarrollaba gracias a la lactancia materna. Si tu deseo es motivado únicamente por un deseo semejante, lo ideal sería que trabajaras en comprenderlo realmente y en no asumir tan a la ligera este rol. Por otro lado, es conveniente que tengas en cuenta los siguientes factores.

• Tu salud durante el embarazo
  
  Debes saber que si has tenido un primer embarazo complicado es muy posible que esta situación se repita. Algunas de las enfermedades de más riesgo pueden ser la preeclampsia o aquellas complicaciones que pueden llevarte a un parto prematuro. Si has tenido un embarazo sano, sin embargo, no es garantía suficiente para creer que el segundo será igual. Todo dependerá de cómo haya variado tu salud durante este último tiempo y en aquellos factores externos que muchas veces ni siquiera se pueden predecir.Debes tener presente también que estar en buena forma a la hora de concebir es fundamental; por lo que, antes de tomar la decisión de quedarte embarazada te recomendamos que te pongas un plan de ejercicios que te ayude a estar en armonía contigo misma y que recurras a una nutricionista que sea capaz de aconsejarte y ayudarte en cuestiones relacionadas con tu alimentación. Previene todo lo que puedas las complicaciones, preparándote con un organismo saludable y feliz a la concepción. Este consejo es válido tanto si se trata de tu segundo hijo, el primero o el número que sea.
• Tu situación financiera
  
  Algunas personas creen que es demasiado frío anteponer las cuestiones económicas a la decisión de tener un hijo; sin embargo, hacerlo es la mejor forma de asegurarte que podrás darle a ese pequeño todo lo que necesita para crecer en forma saludable y ser feliz.Por tanto, una de las cosas que deberás plantearte antes de decidir buscar tu segundo hijo es si puedes permitirte una boca más para alimentar. Para ello deberás analizar, con cuánto dinero dispones para llegar a fin de mes y si tienes una vida lo suficientemente holgada como para emprender nuevamente el viaje de la maternidad.También deberás pensar en qué cosas necesitas. ¿Tu primer hijo todavía utiliza cuna, cochecito y demás complementos necesarios? ¿Es posible que con el dinero que cuentas vuelvas a comprar todo lo necesario? Por otro lado, pese a que hay un dicho que dice que donde comen dos pueden comer tres perfectamente; todos sabemos que no es tan así. Y que, tener un segundo bebé trae un importante gasto adicional; esto significa que tendrás que desembolsar mucho más dinero que con el primero.Lo ideal, por tanto, es que te sientas tranquila con tu pareja y realicen un plan de presupuesto, para saber con cuánto cuentan y si éste les permitiría asumir todos los costes relativos a tener un segundo hijo.
• Tienes el espacio en casa
  
  Un nuevo embarazo exigirá un nuevo espacio en la casa. Otra cama, otro lugar en la mesa, otro rincón de juegos, etc. Por tanto, antes de decidirlo, deberás tener en cuenta si tu casa está preparada para alojar a un nuevo huésped.Y, en caso de que así sea pero a costa de hacer alguna reforma ¿cuentas con el dinero para realizarla? Si la respuesta continúa siendo sí, recomendamos que te pongas manos a la obra para que, cuando llegue tu nuevo hijo esté todo acondicionado para que forme parte de la familia teniendo sus propios espacios.

Otras consideraciones previas

Otras cosas que debes tener en cuenta son consideraciones acerca de tu salud. Debes saber que cuando tuviste tu primer hijo el tiempo que no le dedicabas a él podías tenerlo para ti y abocarte en descansar o hacer aquellas cosas que te hacen bien. Con el segundo el tiempo para ti se reducirá ya que, entre el tiempo que le dedicas al recién nacido y el que destinas al primogénito será bastante importante.

Por otra parte, recuerda que si deseas tener un segundo hijo con un parto vaginal pero el primero ha nacido mediante una cesárea, es posible que no lo consigas si te quedas embarazada con poco tiempo de diferencia. De hecho, se recomienda que si tuviste una cesárea debas esperar como mínimo 18 meses, preferentemente dos años, antes de intentarlo.

En lo que respecta al amamantamiento. Tener un segundo hijo no indica que debas dejar de amamantar al primero; pero recuerda que esto también puede tener sus riesgos, ya que debes procurar que el recién nacido reciba todos los nutrientes que necesita para crecer sano. Por otro lado, amamantar a la vez puede traer consigo complicaciones como la agitación del amamantamiento. Sin embargo, la solución no es dejar de amamantar al primero, sino tomarte con más calma la maternidad; a lo mejor puedes esperar un tiempo a fin de dar lo mejor de ti para cada uno de tus hijos.

¿Te has enterado? Sí, lo que intentamos decidirte es que nadie puede responder a esta pregunta mejor que tú y tu pareja. Lo único que podemos decirte es que debes disfrutar al máximo de tu maternidad y que ésta comprende todas las etapas de la vida. Por lo que podrás seguir gozando de ella aunque no puedas tener un segundo hijo.